Alejandra Bayas o sencillamente
Ale Bayas, es una cantante, pianista y compositora ecuatoriana. Nació en Quito, Ecuador el 27 de noviembre de 1983. Es reconocida por su preparación musical. El 26 de octubre de 1998, interpretó el tema oficial tras la firma de El Acta de Brasilia. Fue un de tratado de paz entre Ecuador y Perú.
Entre sus canciones más conocidas, destacan
"Nada",
"Nuestros caminos" y
"Mundo perfecto".
Ale Bayas aprendió a tocar piano a los cuatro años de edad. Tiene una hermana de nombre María Cristina Bayas.
Estudió música en la extensión del Berklee College Of Music, de la Universidad San Francisco de Quito (USFQ). En esa institución se inició en el jazz, género con el que se dio a conocer como cantante.
"Creo que siempre tuve la vocación. Mis padres siempre me apoyaron. Tienen sensibilidad artística. Mi papá es abogado, pero toca muchos instrumentos", comentó Ale Bayas en una entrevista.
Ale Bayas empezó en la actividad musical desde que era niña. Por más de una década, entre los seis y diecisiete años de edad, grabó varios discos. Esas grabaciones tuvieron como objetivo brindar apoyo a varias fundaciones, en su país. Entre ellas, la Unicef (Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia), en la oficina de Ecuador. También grabó para la Fundación Natura Ecuatoriana, dedicada a la conservación de la naturaleza.
Fue solista de la Orquesta Sinfónica Juvenil del Ecuador, dirigida por el maestro Patricio Aizaga. También cantó con la Orquesta de Cuerdas de la Sinfónica Nacional, bajo la dirección de la maestra Alexandra Vela.
En 2007, Ale Baya viajó a Argentina para trabajar con el productor musical Adrián Laies. Con ese productor, que tiene en su haber un Grammy, grabó sus dos primeros álbumes. Más adelante los presentó, para darse a conocer en la escena musical como intérprete de jazz.
Ale Bayas interpreta jazz y pop. Entre sus influencias musicales, se encuentran los cantautores argentinos
Fito Páez y
Charly García.
En 2009, Ale Bayas publicó el disco
"Day Dream", contentivo de once canciones. Entre ellas
"Nature Boy",
"Angel Eyes" y
"Celia". Tres años después, presentó su segundo álbum de estudio, titulado
"A Time For Love". Fue una grabación realizada en Argentina.
En 2013, regresó a Ecuador, retomando su faceta como pianista. Trabajó con el baladista ecuatoriano
Juan Fernando Velasco. Juntos realizaron varias giras de conciertos, nacionales e internacionales.
Luego de culminar esas giras, Ale Bayas se retiró temporalmente de la escena musical. Estuvo dedicada a sus actividades privadas.
De regreso al estudio de grabación, entre 2017 y 2018 lanzó, respectivamente, los sencillos
"Nada" y
"Nuestros caminos". Un año después, lanzó un nuevo álbum, titulado
"Despertar", que incluyó diez temas, destacándose
"Ya no estás" y
"Blanco y negro".
Cuando Ale Bayas grabó
"Nada", un delicioso tema de música pop, contó Juan Blas Caballero. Ese productor argentino ha ganado siete premios Grammy, por su trabajo con cantantes de talla internacional. Entre ellos, la argentina
Julieta Venegas, la mexicana
Paulina Rubio y el argentino
Vicentico.
En abril de 2022, Ale Bayas publicó un nuevo álbum, titulado
"Una luz". Entre otras, incluyó las canciones
"Una luz", que contó con las canciones
"Ven",
"Pescador de sueños" y
"Te miro a ti".
Desde 2011, Ale Bayas está casada con Carlos Holguín, un destacado político ecuatoriano. De esa unión son sus tres hijos. Para ella ha sido un reto manejar su carrera artística, siendo madre de tres niños. Su familia está en primer lugar, aunque la música es la vocación que ha desarrollado desde pequeña.
En sus redes sociales se presenta como "Cantante, pianista y compositora. Madre de tres. Amo el jazz y los gatos".
Pianista de sólida formación, Ale Bayas ha volcado su talentoso trabajo musical en el jazz. Un género musical, como pocos, que le permite desplegar todo su virtuosismo pianístico, además de cantarlo. Su voz también parece estar hecha para la música pop, en la que ha grabado varios discos.
Caracterizada por su gran dominio musical, su performance en vivo es una muestra de elegante sencillez. Tiene un espacio entre muchos aficionados al jazz y al pop, dentro o fuera de su país. Muy merecido.